La Comunidad de Madrid ha implementado una bonificación del 50% en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, efectiva desde el 1 de julio de 2025. Esta medida, publicada en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM), busca aliviar la carga fiscal de los contribuyentes que reciben herencias o donaciones, especialmente en un contexto económico desafiante.
La bonificación se aplica automáticamente a los beneficiarios incluidos en los grupos I y II del impuesto, que comprenden a hijos, cónyuges y padres. Por ejemplo, un madrileño que herede 300.000 euros de un progenitor pagará ahora aproximadamente 7.500 euros menos que antes de la entrada en vigor de esta medida. Asimismo, un contribuyente que anteriormente debía abonar 12.000 euros por heredar un inmueble valorado en 200.000 euros, ahora pagará solo 6.000 euros.
Es importante destacar que esta bonificación solo afecta a las herencias y donaciones formalizadas a partir del 1 de julio de 2025. Las escrituras previas seguirán tributando según la normativa anterior. La medida ha sido bien recibida por los ciudadanos y expertos fiscales, quienes consideran que contribuirá a reducir la presión fiscal sobre las familias madrileñas y fomentará la transmisión de patrimonios.
Esta iniciativa se enmarca en la política fiscal de la Comunidad de Madrid, orientada a la reducción de impuestos y al estímulo de la actividad económica. Sin embargo, también ha generado debate en otras comunidades autónomas, donde se plantean ajustes similares para evitar posibles deslocalizaciones fiscales.
Con esta medida, Madrid refuerza su posición como una de las regiones con una fiscalidad más favorable en materia de sucesiones y donaciones, lo que podría tener implicaciones significativas en la planificación patrimonial de los contribuyentes.