La Comisión Europea proyecta un crecimiento del PIB del 0,9% para la eurozona en 2025, con una inflación que se espera alcance el objetivo del 2% del BCE este año . El BCE ha iniciado un ciclo de recortes de tasas de interés, llevando la tasa de depósito al 1,75%, para estimular la actividad económica.

No obstante, persisten riesgos como las tensiones comerciales globales y la incertidumbre geopolítica, que podrían afectar la recuperación económica.