La inflación en Estados Unidos mostró señales de moderación en junio, con una tasa interanual del 3%, según la última encuesta de expectativas de consumidores de la Reserva Federal de Nueva York. Este dato representa una ligera disminución respecto al 3,2% registrado en mayo. Las expectativas a tres y cinco años se mantuvieron estables en 3% y 2,6%, respectivamente.
A pesar de esta moderación general, los consumidores anticipan aumentos en los costos de gasolina, atención médica, educación universitaria y alquileres. La inflación subyacente, que excluye alimentos y energía, se mantuvo en 2,8% en mayo, reflejando presiones persistentes en sectores específicos.
El panorama económico se ve influenciado por las políticas comerciales de la administración Trump, que ha implementado nuevos aranceles a las importaciones. Estas medidas han generado preocupaciones sobre un posible repunte inflacionario en el corto plazo, aunque las expectativas a largo plazo permanecen ancladas.
En cuanto al crecimiento económico, el Producto Interno Bruto (PIB) de EE. UU. se contrajo un 0,3% en el primer trimestre de 2025, sorprendiendo a los analistas que esperaban una expansión del 0,4%. Esta contracción se atribuye a una disminución en el consumo y a la incertidumbre generada por las políticas comerciales.
La Reserva Federal ha mantenido las tasas de interés en el rango de 4,25% a 4,50%, a pesar de las presiones para reducirlas. La institución ha señalado que, aunque la economía muestra señales de enfriamiento, la inflación aún se encuentra por encima de su objetivo del 2%.
En resumen, mientras la inflación general en EE. UU. muestra signos de moderación, persisten presiones en sectores clave, y el crecimiento económico enfrenta desafíos debido a factores internos y externos. La Reserva Federal continúa monitoreando de cerca estos desarrollos para ajustar su política monetaria según sea necesario.